Realidad Aumentada: Donde lo Físico se Reúne con lo Digital



Ya sea que en tu lado de la valla haya Pokemones sueltos o no, existe un factor que cambiará el juego por completo. El fenómeno ha probado algo importante: la aceptación masiva y pública de la Realidad Aumentada (RA). Las marcas deben invertir tiempo y recursos para conocer la RA, y considerar sus posibles implicaciones comerciales.

La explicación más rápida de RA es que es una tecnología que permite a los vendedores superponer contenido digital e interactividad en un mundo real, con una vista en tiempo real a través del lente de la cámara en un dispositivo móvil. Mientras que esta tecnología ha estado presente por un tiempo, la falta de madurez y las restricciones de costo han limitado los casos de uso. Al superar la brecha entre el mundo físico y digital, la RA permite la creación de experiencias de consumidores, nunca antes vistas, localizadas y personalizadas a escala.

Considera la audiencia de tu empresa en el camino. ¿Cuál es su necesidad móvil? ¿Qué están buscando para ofrecer o responder? Este es un gran lugar para iniciar conversaciones internas con tus equipos de marketing y equipos digitales, así como tu agencia. En la era post-digital, tu marca no significará tanto si la experiencia asociada es pobre.

Las ideas se pueden encontrar al considerar la forma en que tu marca va al mercado. Hoy no se trata de anunciar tu mensaje de marca, sino de construir un mundo que represente los valores fundamentales de ella, un mundo que la gente quiere explorar y compartir. Invitar a los consumidores a ser parte de algo inventivo y cautivador puede ahora solidificar una relación a largo plazo.

Queremos ayudarte a empezar. En nuestro punto de vista más reciente, hemos esbozado 6 puntos para que las marcas consideren la RA como parte de una mezcla de marketing a corto plazo.

Con la visión correcta de la marca, de su audiencia, y la infraestructura de datos y tecnología, las empresas pueden aprovechar la RA para ofrecer el tipo de experiencias sin fisuras que los consumidores más exigentes esperan.